La distribución y abundancia de las especies cambia con la temperatura y la humedad debido a sus distintos requerimientos. Es evidente como en una montaña, podemos distinguir cinturones o pisos de vegetación marcados por las especies dominantes de árboles o de arbustos. Por ejemplo, en muchos volcanes de México, se observa el cinturón de encinares de los 2,400 a los 2,800 m, el de pinares de 2,800 a 4,000, el de los zacatonales de 4,000 a 4,500 y por arriba la zona de nieves.
Los cambios climáticos afectan la distribución de las especies y mueven estos cinturones hacia arriba con el calentamiento y hacia abajo en épocas de enfriamiento. Los cambios de humedad también tienen impactos similares. Por eso, con el rápido calentamiento global que estamos presenciando las especies pueden salirse de las áreas protegidas. Es importante hacer predicciones sobre los cambios en la distribución de flora y fauna para poder conservarlos.
|